La
Asociación Española contra el Cáncer (AECC) nos da unos consejos acerca
de lo que no es conveniente a la hora de intentar ayudar a las personas
que están pasando por el difícil momento de gestionar el cáncer. Ésta
es una enfermedad que tiene una gran incidencia actualmente y por ello,
no es raro el tener a una persona cercana que está pasando por esa
situación.
Me parece muy interesante la información que da y muy clara el artículo "Lo que no debes decirle a una persona que tiene cáncer". Por ello quiero dejar aquí su enlace.
Incorporo unos breves consejos que espero que puedan resultar de ayuda a la hora de saber lo que sí podemos hacer:
Ante todo es escuchar. Sí. Algo tan simple y, no siempre fácil de llevar a cabo. Escuchar activamente (poniendo el foco en el otro y no en lo que nosotros queremos decir) contribuye a que la persona se desahogue y facilita el poder regular las emociones que suelen aparecer de una forma intensa y dolorosa.
Otro elemento importante es permitir los momentos de silencio. Tienen su función y son necesarios en muchas ocasiones, mucho más que tratar de rellenarlos con consejos o de lanzarnos a decir cualquier cosa.
Se trata de apoyar con la compañía y el cariño, respetando siempre las necesidades del otro. De esta manera vamos a contribuir a que la persona no se sienta sola, pida ayuda libremente en los momentos en los que lo pueda necesitar, y vamos a facilitar el que poco a poco, haciendo uso de sus propios recursos vaya recuperando el control sobre la enfermedad y su tratamiento.
El cáncer es una enfermedad que cursa de una forma muy individual y en estas circunstancias, la persona pasa por muchas fases diferentes. De ahí que sea la propia persona que lo sufre quien, en su proceso y con la ayuda de los demás, podrá aprender a gestionar sus necesidades.
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